AQUI ESTÁ ESTA ENTREVISTA A UN SACERDOTE QUE HACE VIDA EN UN PUEBLO DE COLOMBIA, DONDE LA INFLUENCIA DE LA GUERRA SOCIAL ES MUY FUERTE, Y QUE FUE CAPTURADO CON LA EXCUSA DE PERTENECER A LAS FARC, UN POCO MAS DE LO MISMO EN ESE PAIS, EN EL QUE LA OPOSICION ES PERSEGUIDA CON LA EXCUSA DE LA GUERRA CONTRA EL TERRORISMO, PARA ASI CONSOLIDAR LA HEGEMONIA ECONOMICA DE EXPLOTACION AL PUEBLO, INFUNDANDOLES EL MIEDO DE QUE SI SE OPONEN A LOS QUE DETENTAN EL PODER TENDRAN DURAS CONSECUENCIAS.
Recupera la libertad tras dos meses de arresto domiciliario por su presunta colaboración con la guerrilla colombiana
Texto de/Fidela Mañoso. Fotografía de El Norte.
EL pasado 21 de octubre se le levantó el arresto domiciliario al que ha estado sometido desde el 18 de agosto, tras ser acusado de un presunto delito de rebelión por su supuesta colaboración con guerrilleros de las FARC, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia.
El sacerdote Ricardo Lorenzo Cantalapiedra, nacido en La Seca (Valladolid), trabaja desde 1977 en zonas de conflicto y desde hace dos años es párroco en Uribe, una pequeña población del este de Colombia. Los dos meses privado de libertad los ha pasado en la Casa Provincial de la Sociedad Salesiana, en Bogotá, por orden de la Fiscalía.
-¿Cómo han sido estos dos meses de encierrro?
-No se me hizo duro, porque he estado entretenido, recibiendo muchas visitas, leyendo y escribiendo. No tenía la impresión de estar encerrado, ni de estar preso, ni detenido.
-¿Por qué acabó usted inmerso en esas circunstancias?
-El Gobierno ofrece muchas ventajas, como la rebaja penal, a los que se entregan y acusan a otros. Hubo alguien que dijo que yo acudía a los campamentos de la guerrilla, pero yo hago mi trabajo pastoral y tengo relaciones con todos. He hablado con los comandantes de las FARC y era emotivo, ideologías aparte. El trato ha sido cordial, me han respetado mucho y nunca me han hecho ninguna sugerencia de ningún tipo porque me han visto como sacerdote.
-Qué es lo primero que hizo cuano recobró la libertad?
-Tuve que ir a la Fiscalía para ampliar la indagatoria. Estuvimos analizando las objeciones y desmontando las acusaciones que se me hacían. Aunque mi caso está resuelto, el proceso sigue abierto para tomar otras declaraciones. A nivel personal, y aunque no me sentí cautivo, tuve un cierto alivio porque recibí muchas llamadas y me alegró mucho saber que otras catorce personas que fueron detenidas conmigo también quedaron en librtad.
-¿Se considera un chivo expiatorio?
-Un poco sí, del sistema. Desde un principio traté de recalcar que las detenciones masivas son injustas y es que en dos años, 6.000 prsonas han sido detenidas en capturas masivas.
-¿Exigirá responsabilidades al Gobierno colombiano?
-Por mi parte no, pero hablaré con la gente de Uribe que ha estado 114 días en la cárcel y les apoyaré en lo que pueda. Les estoy muy agradecido de ser parte de ellos, estoy con el pueblo, y su suerte es la mía.
-¿Qué reflexiones ha hecho durante el tiempo de arresto?
-El pueblo depende de una intencionalidad y a veces los políticos buscan más los intereses de partido que los del pueblo y no tienen en cuenta la realidad, lo que pasa. Quieren tener al pueblo engañado. Donde yo realizó mi labor pastoral está abandonado y la única institución presente es el Ejército, pasan los aviones, fumigan los cultivos.... Es un pueblo que sufre en silencio y el Gobierno piensa que la única solución válida es la de ellos.
-Usted lleva 27 años viviendo en primera línea un conflicto civil que dura ya cuarenta años ¿Crere que habrá un final?
-Es muy difícil. La guerrilla es comunista y busca una revolución para acabar con la corrupción del sistema, pero es una utopía, porque se enfrenta a un Estado muy fuerte que cuenta con apoyo internacional. Pero defienden su ideología y mueren por esos principios. Hay muchos intereses y nadie quiere ceder lo mínimo.
-¿Le asusta?
-No, pero me duele la situación de la gente que sufre, la muerte de tantos jóvenes. Es una tragedia muy larga.
-¿Ha pensado abandonar la zona?
-Dependo de una comunidad que me dice que es peligroso que regrese, pero mi voluntad es vivir allí, estar con mi pueblo. Es gente muy temerosa, que ha sufrido mucho y ha vivido muchos combates. Eso les marca y les hace desconfiados, por esoy yo les doy confianza y ellos me piden que vuelva.
-¿Cuando le veremos por Valladolid?
-Tenía pensado ir para Navidad, pero creo que lo dejaré para el verano. Me siento muy unido a todos ustedes y desde aquí les mando un abrazo.
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